28 de octubre de 2008
Muchos laicos que habitan en la zona de Caseros están preocupados.
Allí hay una parroquia que está a cargo de un sacerdote a quién algunos fieles llaman cariñosamente "pan fresco" (porque recién salió) o "masa cruda" (porque todavía no está). Lo que, para ellos, muestra a las claras el grado de presencia que él tiene en el lugar que le toca ocupar hoy y ahora.
A medida que fue pasando el tiempo, esa actitud de ausencia se ha ido incrementado. Ejemplo de ello han sido: misas no celebradas, capillas desatendidas y hasta plantones a los feligreses reunidos para celebrarle su cumpleaños; todo esto como fruto de algunas "escapadas" Dios sabe a dónde y cada vez por tiempo más prolongado. A todo esto e le agrega el hecho de no residir en la sede parroquial.
Como caso puntual, el 1° de octubre pasado fue la fiesta de la patrona de la parroquia. Ese día deberían haberse celebrado las Fiestas Patronales (con su tradicional misa solemne) pero sólo pudo rezarse el Santo Rosario (gracias a la devoción de sus fieles) ya que el padre no se encontraba presente. Todos pensaban que llegaría de un momento a otro, sin embargo eso nunca ocurrió.
Aún hoy, siguen esperando una explicación de lo sucedido. Mientras tanto, sólo les queda sentirse "como ovejas sin pastor".
Allí hay una parroquia que está a cargo de un sacerdote a quién algunos fieles llaman cariñosamente "pan fresco" (porque recién salió) o "masa cruda" (porque todavía no está). Lo que, para ellos, muestra a las claras el grado de presencia que él tiene en el lugar que le toca ocupar hoy y ahora.
A medida que fue pasando el tiempo, esa actitud de ausencia se ha ido incrementado. Ejemplo de ello han sido: misas no celebradas, capillas desatendidas y hasta plantones a los feligreses reunidos para celebrarle su cumpleaños; todo esto como fruto de algunas "escapadas" Dios sabe a dónde y cada vez por tiempo más prolongado. A todo esto e le agrega el hecho de no residir en la sede parroquial.
Como caso puntual, el 1° de octubre pasado fue la fiesta de la patrona de la parroquia. Ese día deberían haberse celebrado las Fiestas Patronales (con su tradicional misa solemne) pero sólo pudo rezarse el Santo Rosario (gracias a la devoción de sus fieles) ya que el padre no se encontraba presente. Todos pensaban que llegaría de un momento a otro, sin embargo eso nunca ocurrió.
Aún hoy, siguen esperando una explicación de lo sucedido. Mientras tanto, sólo les queda sentirse "como ovejas sin pastor".
Corresponsal Virtual