16 de octubre de 2008
Hace un tiempo, en una parroquia congregacional de José León Suárez empezó a funcionar una "Pastoral de la Salud" guiada y coordinada por tres personas que, contando con el total apoyo del cura párroco, se incorporaban a esa comunidad sólo para poder implementar dicha tarea apostólica.
La "Pastoral de la Salud" de esa parroquia funciona así:
Cuando alguien de la comunidad, digamos por caso, una catequista, va a hablar con el sacerdote para plantearle algunos problemas personales y familiares que está atravesando, éste la deriva de inmediato a la "Pastoral de la Salud". Luego de varios encuentros y charlas entre la catequista y los miembros de la pastoral, se le diagnóstica a la catequista un porcentaje de enfermedad; se le dice, por ejemplo, "Usted tiene un 60% de enfermedad".
La "Pastoral de la Salud" de esa parroquia funciona así:
Cuando alguien de la comunidad, digamos por caso, una catequista, va a hablar con el sacerdote para plantearle algunos problemas personales y familiares que está atravesando, éste la deriva de inmediato a la "Pastoral de la Salud". Luego de varios encuentros y charlas entre la catequista y los miembros de la pastoral, se le diagnóstica a la catequista un porcentaje de enfermedad; se le dice, por ejemplo, "Usted tiene un 60% de enfermedad".
Para curar ese porcentaje enfermo, a la catequista en cuestión le piden un compromiso de dejarse ayudar e ir una vez por semana para ser atendida poralguien del equipo de la pastoral de la salud. Cuando acepta, los simpáticos "Agentes de Salud" le comunican que cada consulta le sale $70 y debe abonar un total de $280 al mes (este precio es de Julio, hoy tal vez haya variado), en caso de que no pueda pagarlo le ofrecen la metodología de la "Red solidaria" que funciona de la siguiente manera: la catequista debe juntar entre sus amistades, parientes y conocidos por lo menos 10 personas que sean tan amables de pagar $28 por mes para que ella pueda cubrir la cuota establecida y así pueda atenderse. El celo pastoral de estos agentes es tal que diagnosticaron a todo el equipo de catequistas obteniendo como resultado que el 90% de ellos tiene algún porcentaje de enfermedad.
Alarmados por semejante diagnóstico, los catequistas se contactaron con la coordinadora diocesana de catequesis, quien muy amablemente se reunió con ellas y el sacerdote en la parroquia. La única conclusión que se sacó en esa reunión fue que el padre se puso muy nervioso cuando salió el tema de la "Pastoral de la Salud" y se retiró, de hecho, curiosamente "olvidó" mencionarlos cuando listaba a todos los grupos que funcionaban en la parroquia.
Además de curar a las personas enfermas, esta "Pastoral de la Salud" llegó a la parroquia con otro objetivo: editar un libro, cuyo costo debe ser cubierto por la parroquia o, mejor dicho, por los agentes de pastoral de la parroquia. Luego de una sutil campaña de acoso y presión a los miembros de la comunidad (les pedían una colaboración de $100 - $150 a cada uno), lograron juntar el dinero y van a hacer la presentación formal en Casa Joven (lo iban a hacer en la UCA pero era demasiado grande el lugar).
Algunos destacados recibieron una invitación especial que dice:
Además de curar a las personas enfermas, esta "Pastoral de la Salud" llegó a la parroquia con otro objetivo: editar un libro, cuyo costo debe ser cubierto por la parroquia o, mejor dicho, por los agentes de pastoral de la parroquia. Luego de una sutil campaña de acoso y presión a los miembros de la comunidad (les pedían una colaboración de $100 - $150 a cada uno), lograron juntar el dinero y van a hacer la presentación formal en Casa Joven (lo iban a hacer en la UCA pero era demasiado grande el lugar).
Algunos destacados recibieron una invitación especial que dice:
Acto cultural
Invitación Especial
Presentación y alcance de la obra
El Cristo de la Salud
Por el Padre (de la parroquia en cuestión) y el equipo de prevención
VIDEO TESTIMONIAL
Sábado 18 de octubre de 2008 a las 15:30 hs.
Para tan importante evento la catequesis de ese sábado será dada en la misma Casa Joven, por lo que ya está organizado el traslado de padres, niños y catequistas.
Según parece, los padres no quieren ir porque les van a tratar de vender el libro y conociendo las técnicas de insistencia y presión de los agentes de salud, seguramente lo hagan.
La única pregunta que queda sin responder es: ¿El obispo sabe todo esto?
0 correcciones fraternas:
Publicar un comentario